Navacerrada, hombre y naturaleza en centenaria armonía
Navacerrada
Navacerrada está situada a 52 kilómetros de Madrid y tiene una superficie de 32 kilómetros cuadrados. El pueblo se encuentra en pleno Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama, de hecho gran parte del término municipal está rodeado por algunas de las montañas más altas y simbólicas del Sistema Central. Esta ubicación hace que Navacerrada tenga un clima montañoso y supone un atractivo más para visitar la localidad.
Plaza de los Ángeles, 1.
28491 Navacerrada
Tel.: 91 856 00 06 / Fax: 91 856 04 36
www.aytonavacerrada.org
Historia
El origen del núcleo de Navacerrada se localiza en un enclave surgido del aprovechamiento de una pequeña depresión o rellano que fue repoblado por ganaderos segovianos en la época posterior a la Reconquista. Por aquel entonces, madrileños y segovianos comenzaron a enzarzarse en una disputa que duraría más de tres siglos y se basaría en la posesión de las tierras de la Sierra de Guadarrama.
Uno de los que intentó poner paz en la contienda fue Alfonso X El Sabio, cuando tomó en su posesión algunos pueblos de la región, incluido Navacerrada, y los unió bajo el nombre de El Real de Manzanares. El estado del Real y Condado de Manzanares estaba compuesto en sus orígenes por una villa (Manzanares el Real) y 19 lugares más, entre los que surge el nombre de Navacerrada. Pero las disputas continuaron hasta que en 1436 las tierras fueron entregadas a la familia Mendoza y, más concretamente, al Marqúes de Santillana, con el título de condado.
Al lado del rellano que formaba Navacerrada había un puerto de montaña -lo que hoy es el Puerto de Navacerrada– que dividía las provincias de Madrid y Segovia. En el siglo XIII, era conocido como Puerto de Mançanaresantes. En él, sólo había una pequeña alberquería medieval a la que a sus moradores el rey Alfonso X concedía privilegios y extensiones de pechos -mayores beneficios- a cambio de guardar un paso cuya gran altitud, cercana a los 1.900 metros, y la gran persistencia de la nieve en sus laderas no debían animar demasiado a los viajeros a atravesar estas alturas. Este puerto pasó a llamarse en el siglo XVI Puerto de Navacerrada, debido a la proximidad con la localidad. Pronto, en ese mismo siglo, el paso se abandonó.
La población en los siglos XVI, XVII y XVIII fue similar a la de otros pueblos pertenecientes a El Real de Manzanares. En el siglo XVII hubo una quiebra demográfica que ocasionó un grave descenso de la población que no se recuperó hasta finales del siglo XX. A pesar de esto, en el XVIII hubo una leve recuperación de modo que en 1713 había 92 habitantes, mientras que poco después, en 1768, la cifra era de 242. Esta recuperación fue posible gracias a que las posibilidades de subsistencia aumentaron ante las obras públicas emprendidas por los monarcas de la época. En 1635 Felipe V concedió a Navacerrada el titulo de Villa.
El Catastro del Marqués de la Ensenada, del siglo XVII, reveló algunos datos de la población. La principal forma de vida de los habitantes era la agricultura, la ganadería y el aprovechamiento forestal. Había 60 vecinos. A principios del siglo XIX, el número de habitantes ya era de 120. Y, a finales de éste, 302. Su principal forma de vida se mantenía, aunque hubo que añadirle entonces una floreciente industria de productos lácteos. Además en ese siglo se creó la primera industria en el Valle de la Barranca, la de la Nevería –fabricación de hielo que luego se transportaba a Madrid-.
Navacerrada fue otro de los pueblos de la Sierra de Madrid que se benefició de los primeros contactos que los madrileños tuvieron con la naturaleza en relación con el excursionismo y la salud. Así, es en el siglo XX cuando se produjo el principal desarrollo de Navacerrada. En 1904, se empezó a esquiar en la Sierra de Guadarrama y surgen diferentes edificios relacionados con estas actividades.
El ferrocarril de Cercedilla al Puerto de Navacerrada se empezó a construir en 1919 y se inauguró en 1923. En esa época se construyó también el Real Sanatorio de Guadarrama. Y, en esos años 20 se conocieron los primeros datos de población del siglo, llegando en 1921 a los 238 habitantes.
Tras la Guerra Civil, Navacerrada se comenzó a consolidar como pueblo eminentemente veraniego y aparecieron las primeras colonias alrededor del casco de la ciudad. Asimismo, su población también se consolidó y aumentó hasta llegar a las miles de personas, especialmente en la época de invierno, periodo ideal para el esquí, así como en el resto de periodos vacacionales.
Cultura
Los amantes del patrimonio deberían visitar Navacerrada. La configuración urbana de la población –con muchas de sus calles empedradas y con edificios integrados en el entorno- y las muestras de arquitectura religiosa y civil hacen de la localidad un lugar ideal para experimentar sensaciones y disfrutar con cada rincón de Navacerrada.

Ermita de San Antonio
La Ermita está situada en la Dehesa de la Golondrina y se erigió para conmemorar a San Antonio de Padua. La construcción es de piedra, dispone de un porche con dintel y su exterior ha sido reformado. La ermita es el lugar de destino de la Romería que todos los 13 de junio realizan los habitantes de Navacerrada para honrar al santo italiano.

Plaza de los Ángeles
La Plaza de los Ángeles es uno de los puntos más relevantes de Navacerrada. Dentro de su perímetro se encuentra el Ayuntamiento y la Fuente de los Ángeles.
La fuente, construida en piedra, presenta cuatro pilones cuadrados que rodean un cuerpo pétreo vertical de donde mana el agua a través de cuatro caños ornamentados con motivos angelicales. Este cuerpo vertical está coronado con una lámpara con varios brazos que recuerda a los elementos decorativos palaciegos.

Iglesia de la Natividad de Nuestra Señora
Plaza de la Iglesia, s/n.
Esta Iglesia fue construida con mampostería y sillares en el siglo XVI y parte de ella fue restaurada en el siglo XVIII y en el XX. En esta última se modificó parte del interior y se añadieron una capilla y la sacristía. La Iglesia, erigida sobre un cerro, es de una nave con cabecera plana y presenta una torre de tres cuerpos separados por impostas. La torre está coronada con un campanario con ojos de medio punto.
La puerta, de medio punto adovelada, está situada en el lado sur y en el exterior se añadió un atrio con columnas. En el interior de la nave -cubierto con bóveda barroca- destacan la capilla mayor, el coro -de madera, se apoya sobre columnas de granito- y la capilla bautismal –con una pila de granito del siglo XVI-.

Fuentes
En Navacerrada el agua brota por doquier, aflorando numerosos manantiales de frescas aguas procedentes del deshielo de las nieves de cumbres. En este pueblo existe una cultura del agua, prueba de ello son las más de doce fuentes de piedra que podemos encontrar paseando por el pueblo, algunas de ellas de varios siglos de antiguedad. Destacan la fuente de la Canaleja (Plaza de la Canaleja, s/n), la de San Antonio (Calle Encinilla, s/n) y la de los Ángeles (Plaza de los Ángeles, s/n).
Fiestas y tradiciones
Navacerrada tiene dos festividades principales que cuentan con gran tradición y arraigo entre los habitantes de la localidad: San Antonio de Padua –el 13 de junio- y Nuestra Señora de la Natividad –el 8 de septiembre-. El gran número de eventos, acontecimientos y espectáculos que se organizan son también un reclamo para miles de visitantes que, además de las fiestas, quieren disfrutar de todas las posibilidades de Navacerrada.
- Fiestas de San Antonio de Padua: El 13 de junio es el día grande de esta fiesta que recuerda a San Antonio de Padua que es, además, patrón de Navacerrada. Para honrar al santo italiano, después de desayunar rosquillas con anís, se sube en procesión hasta la Ermita de San Antonio, situada en la Dehesa de la Golondrina. También se organizan concursos de corta de troncos, juegos, doma de caballos y se degustan las sabrosas patatas con costillas acompañadas con limonada.
- Fiestas de Nuestra Señora de la Natividad: El 8 de septiembre, Navacerrada conmemora Nuestra Señora de la Natividad, aunque los días previos y posteriores también hay celebraciones, en lo que constituyen las Fiestas Patronales de la localidad.Para que toda la población esté representada, se celebra el Día del Niño, el de la Mujer, el del Mayor y el del Hombre. En conjunto, son unas jornadas repletas de eventos donde destacan los encierros y corridas de toros, las competiciones deportivas, las actuaciones musicales, los pasacalles, los actos religiosos y, sobre todo, la convivencia entre vecinos y visitantes.
Naturaleza
La ubicación de Navacerrada, en plena Sierra de Guadarrama y rodeada de montañas, le otorga unas características naturales peculiares y con gran valor paisajístico donde el agua también está muy presente. Entre las especies vegetales que abundan en el término municipal se encuentran los robles, pinos silvestres, sotobosque de jara, cantueso y zarzamora y en las riberas se observan chopos, fresnos y álamos.
En lo que respecta a la fauna, ésta no desaprovecha la ocasión para habitar los espacios naturales anteriormente señalados.
Mamíferos: jabalíes, zorros, corzos, ardillas, conejos… aves como verderones, herrerillos, perdices, búhos, rapaces, patos, garzas… y anfibios, reptiles como la lagartija serrana, e insectos comparten el ecosistema de Navacerrada.
En el municipio se encuentran alojamientos y casas rurales para albergar a los visitantes y ofrece gran variedad de rutas de senderismo.

Área recreativa La Barranca
Ctra. M-607
En el corazón del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama.Dispone de agua potable, bancos y mesas, papeleras y aparcamiento.
Se ubica en las inmediaciones del pinar de La Barranca, que da nombre a esta área. Además de pinos, se pueden observar ejemplares de jara, piornos, aves, reptiles y algún venado. Dada su situación, las zonas próximas al área son idóneas para estar en contacto con la naturaleza y practicar deportes al aire libre.

Dehesa de la Golondrina
Ctra. M-601
Esta dehesa está situada a la orilla de la carretera M-601, en la Sierra de Guadarrama. En su interior existen sendas que llevan hasta cinco manantiales de agua, a la Ermita de San Antonio y al mirador de la Ermita de San Antonio.

Embalse de Navacerrada
El Embalse de Navacerrada en plena Sierra de Guadarrama, entró en servicio en 1969 y ocupa una superficie de 93 hectáreas. Puede almacenar hasta 11 hectómetros cúbicos de las aguas que recibe del río Samburiel y del Embalse de Navalmedio -por medio de un trasvase-. La presa de este embalse tiene una altura de 47 metros.

Mirador de la ermita de San Antonio
Como su nombre indica, se sitúa en las inmediaciones de la Ermita de San Antonio y ofrece excelentes vistas de la zona occidental de la Sierra de Guadarramacomo, por ejemplo, los cerros de Navacerrada y de Collado Mediano, La Maliciosa, la sierra de los Porrones, La Pedriza.
Para acceder al mirador hay que seguir las indicaciones hacia la Ermita que se encuentra en el kilómetro 11 de la carretera M-601. Para apreciar con detalle el paisaje es muy recomendable llevar unos prismáticos y un mapa.

Mirador de la Presa del Embalse de Navacerrada
Situado en la presa del Embalse de Navacerrada, en la Sierra de Guadarrama, el mirador permite -siempre con el agua a los pies- admirar el perfil serrano que rodea el término municipal y, también, las especies de fauna acuática. Para disfrutar con más detalle de las vistas es conveniente llevar prismáticos y un mapa.
Se puede acceder al mirador desde Navacerrada –por la M-601-, desde Becerril de la Sierra –por la carretera M-861- y desde el cruce del collado de Roblelpoyo.